Habitación sencilla pero funcional, las camas eran muy cómodas y el baño estaba muy limpio, pero los muebles no podían tener más polvo. La cocina no la usamos y la lavadora tampoco porque únicamente estaba en japonés.
Está bien situado, muy cerca de una parada de autobús bien comunicada.
El depósito de las llaves en una caja fuerte para el check in y check out es muy cómodo, pero el que manden el código unas horas antes del momento de llegada provoca bastante intranquilidad, sobre todo porque no contestaron ni a un solo mensaje de los que escribimos para aclarar dudas sobre este tema, incluso a través de Expedia.