El hotel estaba cerca de la terminal de trenes, cuando llegamos nos dieron una habitación en la cual no funcionaba el aire acondicionado y daba el sol en la ventana de la misma. Nos dieron un ventilador xq la temperatura había bajado. Me quejé en Accor y ahí nos ofrecieron cambiar de habitación. Muy desprolijo para un hotel de la cadena Accor . Reconocían qué era una habitación muy calurosa y el qué nos dió la habitación nunca la quiso cambiar. Desayuno correcto pero cuándo quisimos reservar para cenar el último día fue imposible x qué estaba todo ocupado. Llegamos 21,30 hs y estaban todas las mesas vacías. Soy cliente de la cadena y nunca me pasó lo qué esta vez.