Cuando llegamos al hotel, la habitación con las características de mi reserva, no estaba disponible, pues nos asignaron otra que no cumplía. Tras algunas horas, desde la recepción nos pidieron hacer un cambio a otra habitación que sí tenía las características solicitadas. Pero esa habitación solo era para la primera noche, porque a la mañana siguiente teniamos que cambiar a otra habitacion (la tercera en menos de 24 horas!). La justificación fue un problema interno del hotel de asignación de habitaciones. Al entrar en la tercera habitación, en seguida vimos que había un problema de fontanería muy grave: el tubo de lavabo del baño estaba roto y toda el agua caía en el suelo. Es imposible que el hotel desconociese semejante avería porque era muy evidente y hasta el mueble del baño estaba hinchado, a demostración que se trataba de una avería que llevaba tiempo. Finalmente tuve que exigir otra habitación aunque no estaban de primeras dispuestos a ofrecernos una solución adecuada. Pésima gestión